Cinco años de trabajo correcional sin internamiento por el delito de atentado que no ocurrió

Noe Martínez Avile ya ha sido interrogado varias veces desde que tenía 11 años por las actividades de su padre. Ha sido interrogado sin que ninguno de sus parientes estuviera presente. Desde hace algunos años le tiene muchísimo miedo a los policías, y cuando ve uno se pone muy nervioso. El día 5 de septiembre llegaron los agentes de la Seguridad del Estado y de la Policía Nacional Revolucionaria a la casa de Raúl Martínez Caraballo y su familia, donde se encontraba Noe junto a su madre. Los oficiales entraron en su casa sin mostrar orden de registro. Los perros de la familia empezaron a ladrar y a acercarse a los policías. Noe tiró una piedra a los perros para que no atacaran a los policías, y la piedra chocó contra una de sus tías que llegaba a la casa al ver qué sucedía. La piedra no tocó a ningún oficial. Aun así, Noe que acaba de cumplir 17 años, está acusado de atentado y el día 8 de diciembre ha recibido la sentencia que le condena a 5 años de trabajo correcional sin enteramiento. La primera sentencia era de 5 años de privación de libertad. Su padre, Raúl, que llegó a casa durante el registro y a quien se llevaron a la estación policial, donde permaneció 4 días, piensa que uno de los policías se lastimó el pie cuando lo metía en el coche patrullero, pero intenta acusar a Noe de su herida. Durante el registro le ocuparon su computadora, una radio, documentos personales y libros y dejaron la casa destrozada. A Noe lo detuvieron después de la detención de su padre y le dejaron irse después de 3 días con una multa de 1000 CUP (aprox. 32 euros) y la acusación de atentado. Durante su detención le interrogaron vasias veces preguntando por las actividades de su padre.