Por falta de información para interposición de denuncia, joven cubano sigue a merced de su atacante

Mariano Damián caminaba con otro adolescente amigo suyo, con el objetivo de ir a una fiesta. Cuando llegó a la calle Crombet y Martí, un joven de 18 años comenzó a ofenderlo y trató de herirlo con una lima (un cuchillo artesanal). Mariano huyó del atacante y buscó una patrulla que fue encontrada a pocos metros del lugar. La patrulla lo llevó a la unidad del Parque 24 y llamaron a su padre para que lo recogiera y lo llevara a su casa. Cuando el padre llegó, quiso presentar una denuncia contra el atacante, de quien conocía la identidad. El oficial de guardia le dijo que la denuncia no podía hacerse allí porque era menor de edad, y que tenía que ir al día siguiente a la unidad 8 sur y 3 oeste. El padre fue a la unidad mencionada al día siguiente y se le dijo que allí no se interponían esas denuncias. En ambos lugares, le informaron mal y por lo tanto no pudieron presentar una queja contra el atacante. Después de esto, Mariano ha seguido viendo al agresor en la calle y ha tenido que huir de él, temiendo nuevas represalias, por lo que se siente desprotegido.