Los militares hicieron el registro en la casa del activista, después lo golpearon

La vivienda de Francisco Rangel Manzano, administrador del proyecto humanitario Capitán Tondique, fue objeto de un minucioso registro al amanecer. Cuando abrió la puerta, hombres corpulentos de los Boinas Negras y con armas largas en sus manos ya estaban ubicados en la parte trasera y delantera de la vivienda. Cercaron la cuadra con autos policiales y militares uniformados, impidiendo así el tránsito. Rangel Manzano pidió copia de la orden de registro y quien venía al frente le dijo que se la entregarían en la estación de policía, lo cual no ocurrió. Le preguntó al principal varias veces su nombre, y no se lo dió. Entre las cosas que le ocuparon estaba literatura, dinero en CUP, materiales por la campaña Cuba Decide y el proyecto Capitán Tondique, fotos de amigos, discos, memorias USB, vajillas y todos los comprobantes de pago de las multas impuestas a los activistas y Damas de Blanco. Una vez concluído el registro, montaron a Francisco Rangel Manzano en un auto patrulla mientras gritó: "¡Vivan los derechos humanos!". Los Boinas Negras le propinaron algunos golpes. Una vez en la estación de policía lo ubicaron en un calabozo sin que mediara la correspondiente Acta de Detención como establece la Ley de Procedimiento Penal. Cuando comenzó a gritar al ver como golpeaban a su esposa, lo volvieron a golpear. Antes de ser liberado, le impusieron una multa por un valor de 3000 CUP por "resistencia y desobediencia", a tenor del Decreto Ley 310. Lo pusieron en libertad a las 5:30 pm.