Activista del miembro del Movimiento Cristiano de Liberación arrestado, interrogado y amenazado

En horas de la mañana del 26 de febrero, efectuaron un registro en la casa del activista Virgilio Palomino Suárez, miembro del Movimiento Cristiano de Liberación (MCL), alegando la tenencia de propaganda enemiga. Los agentes estatales confiscaron varios documentos viejos y lo detuvieron para investigarlo sobre una presunta aparición de volantes en algunas calles. Durante su estancia en la Unidad, fue interrogado en varias ocasiones y amenazado para que implicara o delatara a otros activistas que pudieran haber repartido los volantes. A pesar de su avanzada edad fue amenazado con ser llevado a juicio y prisión por complicidad con la contrarrevolución interna y con intervenir para que lo echaran de su trabajo. El activista fue retenido en una celda tapada, con pésimas condiciones higiénicas y oscura. Durante las tres noches que pasó allí, fue sacado para interrogatorio en horas de la madrugada. Al ser liberado le realizaron un acta de advertencia por divulgación de propaganda enemiga y no le devolvieron ninguna de las cosas confiscadas durante el registro.